Santuario y Parroquia del Perpetuo Socorro - Iglesia San Alfonso, Salta Argentina.
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Una cosa es ser redentorista y otra cosa es reconocer a otro hno. el camino redentorista que va haciendo.
Los redentoristas somos transmisores de la historia y por eso debemos contarla.
Estamos invitados por el Gobierno Gral. de la Comunidad a promover la vocación redentorista desde el 1 de Agosto del 2013 hasta el 9 de Septiembre del 2014.
El objetivo es renovar el llamado que Dios nos hace por medio del bautismo desde este carisma misionero redentorista. Todos debemos seguir y anunciar a Jesús. Graciela Fernández nos escribe sobre su experiencia del encuentro de Familia Redentorista 2014.
Encuentro Nacional de Familia Redentorista, del 27 al 31 de Enero 2014 - Villa Allende, Córdoba/ Convento San Alfonso
"LLAMADOS A LA REDENCIÒN DESDE NUESTRA VOCACIÒN"
Un año más nos encontramos con toda la familia reafirmando el llamado a identificarnos como Redentoristas. Durante este encuentro se celebro la vida invitando a que se extendiera la celebración durante todo el año.
Como redentoristas estamos llamados a dar la vida por la abundante redención.
El logo de este encuentro nos muestra el ser misioneros a la manera de San Alfonso dejando nuestras huellas y confiando que en la barca de nuestras vidas, nuestra madre del Perpetuo Socorro siempre nos acompaña.
El saludo del redentorista es el abrazo, elegimos este signo porque va más allá de lo que expresamos.
Hay dos tipos de abrazos:
 Abrazo de Madre: invita a refugiarnos, cobijarnos, quedarnos.
 Abrazo de Padre: anima, levanta, sostiene, pero a la vez, con unas palmaditas nos conduce e invita a que sigamos.
El objetivo de este encuentro fue:
Renovar el llamado que el Señor nos hace, redescubrir la vocación específica y redescubrir la misión de nuestra vocación.
El Papa Francisco nos invita a vivir a una nueva era basada en la unidad y el dialogo.
"El que no camina sin dejar huellas, no sirve para nada"
Hay que dejar huellas para que haya herencia, nos dice el Papa Francisco.
El Papa Francisco es un hombre humilde, sencillo preocupado por el dolor ajeno, combate la injusticia. No se queda en la dimensión terrenal, pero tampoco se queda en la dimensión espiritual.
En la vocación hay que responder con prontitud, con disponibilidad. Cristo es y debe ser el centro de nuestras vidas, el cristiano debe ser consciente, consecuente, comprometido, sencillo y humilde.
La Pasión de Dios son los humildes y sencillos.
La cultura del Encuentro consiste en:
 Ser oyentes: debemos escuchar al Señor en el silencio que inspira en nosotros y también en el hermano. Debemos promocionar, cultivar la amistad y el respeto, seguir en el dialogo ecuménico.
 Buscar: todos debemos salir a buscar más pastores salir a dar a conocer a Jesús. Tenemos que buscar a Dios donde se manifiesta, buscarlo en lo sencillo, en lo pequeño, buscar aquello que dé y nos dé a cada uno en vida. Para ello hay que despojarse de todo, no debemos tener miedo de ser humilde, abajarnos respetando tu vida y la del prójimo, amar y aprendiendo a amar.
El Papa Francisco tiene una imagen del pastor que va al frente dejando huellas, un pastor que va al costado para alentarnos a seguir; un pastor que va atrás para que no abandonemos.
Comencemos el camino preocupados el uno por el otro retomando la confianza en el trabajo diario. Dios no se cansa de perdonarnos, no nos cansemos nosotros de pedir perdón.
Nos preguntemos:
¿Soy humilde? ¿Seré capaz de ser humilde? ¿Estoy con Dios en cada momento de mi vida?
En un libro que escribió el Papa Francisco, expresa: "El mundo actual se apoya en el consumo, tengamos en cuenta que el bien se expresa al comunicarse, entonces debemos tener un lenguaje que valore lo positivo del hermano".
También nos invita a involucrarnos a nivel de la construcción social sintiéndonos cuidadores de la sociedad, del mundo haciéndonos cargo, participando en lo que respeta en lo político y económico. Debemos tener un gusto por la pobreza que vivimos en todas las dimensiones.
La teología del encuentro nos muestra a un Dios cercano, misericordioso, vivo.
Oración, Reflexión y Reconciliación. Hna. Adriana
Los aromas nos ayudaran a adentrarnos en tres dimensiones: Contemplación, meditación y acción.
Aroma del incienso: Vida que quiere ser ofrenda agradable a Dios. Sus propiedades terapéuticas, las encontramos en su aceite y su perfume, ayuda a la cicatrización y actua contra la depresión.
Aroma de la mirra: va unida a la muerte, a todo lo que tenga que ver con nuestros límites, sombras y pecados. Es de gusto amargo pero dulce aroma. Este aroma nos invita a vivir los valores del reino que a su vez nos trae amarguras.
Sus propiedades terapéuticas acompaña procesos para abrir las vías respiratorias, mejorar los bronquios, ayudar a la producción de jugos gástricos.
Aroma del Nardo: Los juncos del nardo se cultivan en el Himalaya. El amor de Dios es nuestro perfume de nardo. Su perfume es dulce, intenso y duradero como el perdón de Dios.
Sus propiedades terapéuticas ayudan a reponerse de la fatiga, aclara la mente, alivia dolores de cabeza y migrañas, acompaña situaciones de convalecencia, permite descansar.
Bien ahora que conocemos esto, pensemos a solas ¿En cuál de estos aromas me siento?
La herencia que San Alfonso nos dejo es la Redención de Jesús, de San Alfonso aprendemos a asomarnos al misterio de Jesús Redentor, él nos marca el camino que debemos seguir.
Hicimos un viaje de la mano de un Hno. Redentorista de África, Jean quien nos propuso ir a Argelia donde hay una comunidad de Hnos. Cretenses quienes tenían un hospital, a raíz de un conflicto de guerra se reunieron y decidieron ofrecer todo sus dolores, sufrimientos y muerte en una palabra dar sus vidas por y en Argelia.
El Hno. Jean nos pide ver la Redención como contemplación o sea mirar como Dios ve, como Dios mira, tener los mismos pensamientos de Jesús. Pensemos como redentoristas, mirar la vida de los demás como Dios la mira.
En la contemplación comenzamos a ver como Dios ve, quien mira con amor. Quien mira en el rostro de Dios nos encontramos como hombres y mujeres redimidos, también nosotros somos ladrones felices abrazados baja la mirada del Padre.
Ahora el Hno. Jean nos lleva a otro lugar, Sudáfrica. Nos cuenta que en un lugar donde se trabaja con jóvenes en situaciones de riesgos, matan a Ámel Dial un joven de 20 años de edad, pasado un tiempo llegan al lugar los padres, tomando la palabra la madre, dice:"La muerte de nuestro hijo es un dolor que siempre nos acompañara, pero lo que más nos duele es que estos jóvenes se quiten la vida entre ellos, debemos hacer algo, debemos recuperar a estos jóvenes".
El Hno. Nos pide ver la Redención como justicia restauradora, como verdad construida entre todos.
Redención como justicia restauradora, como Perdón que restaura. Como redentorista debemos vivir el perdón como expresión de verdad y restauración, sabiendo que el perdón dignifica a quien lo da y a quien lo recibe, devolviendo la belleza original a nosotros y al otro.
Cerremos los ojos, digamos: "yo (nuestro nombre completo)................. venero a la Santísima Trinidad que está en mi corazón, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén. Ahora traigamos a la mente a esa persona que nos hizo daño o quizás que nosotros le hicimos daño. Ahora, mirándola en nuestra mente digamos: "Yo..............., venero en (nombre de la persona)................ a la Santísima Trinidad en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Ahora el Hno. Nos invita a Scala en Nápoles, donde nos propone ver la redención desde la belleza. Este misterio de la redención nos alcanza la palabra para expresar. La belleza, el arte, los aromas nos ayudaran.
San Alfonso puso todos sus dones para que este misterio sea conocido. Tomo de las cosas populares para ponerles los valores del evangelio, compuso canciones, escribió poemas, realizo pinturas.
Debemos expresar con belleza el amor de Dios, de anunciar a tiempo y a destiempo con lenguaje sencillo y de amor el misterio de la redención. Un cartel, un gesto, un abrazo, una mirada es poner el amor de Dios en cercanía.
Descubriendo los aromas:
1º Aroma Incienso: Redención como contemplación. Ver como Dios nos ve.
2º Aroma Mirra: Redención como verdad que se construye y la justicia que nos devuelve la dignidad y la belleza en nosotros y en los demás.
3º Aroma Nardo: Redención como belleza, poner todos nuestros dones a favor de buscar, vivir y anunciar la redención.
Vocación Redentorista
Una cosa es ser redentorista y otra cosa es reconocer a otro hno. El camino redentorista que va haciendo.
Los redentoristas somos transmisores de la historia y por eso debemos contarla.
Estamos invitados por el Gobierno Gral. de la Comunidad a promover la vocación redentorista desde el 1 de Agosto del 2013 hasta el 9 de Septiembre del 2014.
El objetivo es renovar el llamado que Dios nos hace por medio del bautismo desde este carisma misionero redentorista. Todos debemos seguir y anunciar a Jesús.
El desafío que tenemos todo bautizado y misionero es que sea un anuncio provocativo, atrayente, que contagie el carisma misionero. La vida se acrecienta dándola y que madure fortaleciéndola con otros.
Todos somos misión que nos construye como personas de Dios. La misión es anunciar a una persona viva que es Jesús.
Nos preguntemos:
 ¿Experimente la redención? ¿En qué situación y momento de mi vida?
 Que me aporta el carisma redentorista ?
 ¿Qué aporto yo al carisma redentorista?
La Misión
La misión provoca decisión que surge a lo largo de un camino de búsqueda. No es solo mirar hacia afuera si no en nosotros mismos, mirar mi esencia y originalidad.
Ser uno mismo y uno más descubriendo lo que Dios me ha regalado e ir más allá.
La misión promueve un Camino, en la vida experimentamos tensión entre lo que queremos, debemos y podemos. La vida es simple no es fácil, es importante descubrir el para qué y por qué.
Somos peregrinos que se encaminan hacia algún lugar sagrado, mi lugar sagrado es lograr conseguir la mayor versión de nosotros mismos y ese es el regalo que le hago a los demás.
La misión prioriza la responsabilidad capaz de responder a los cuestionamientos que la vida nos hace, enfrentándolos. Esto nos tiene que llevar a reconocer que la vida es un don que hay que entregarlo.
El Papa Francisco nos dice:"Autentica Fe provoca cambiar valores, dar a conocer la vida desde la Fe".
La Fe se vive y se celebra. La vocación es Don, debemos fomentarla y cuidarla, Dios nos llama.
Debemos rezar por nuestra vocación laical, por nuestros sacerdotes.
Redentoristas en Salta - J.M. Leguizamón 812 - (04400BOR) Salta, Argentina.
Tel./Fax: (0387) 4212109 / 4227198 AVISO LEGAL | Todos los derechos reservados (c) 2011 |